Hoy Argentina es un país más justo y más laico
Esta madrugada el Senado convirtió en ley el aborto legal por 38 votos a favor y 29 en contra. Y desde CAEL no podemos hacer más que celebrar, expresar nuestra alegría y abrazar a las compañeras y les compañeres que hicieron posible esta ampliación histórica de los derechos de las mujeres, lesbianas, masculinidades trans y nobinaries y otras personas con capacidad de gestar.
Celebramos que Argentina es hoy un país un poco más justo y un poco menos cruel; un país en el que desaparecerán los abortos clandestinos y todo el dolor asociado a ellos.
Pero celebramos también que hoy Argentina es un país un poco más laico. Es cierto que, a juzgar por los discursos de algunxs senadorxs (sobre todo senadores), pareciera todo lo contrario. Vimos, tal vez no con sorpresa, pero sí con preocupación cómo los fundamentalismos intentaban disfrazarse de argumentos; vimos al clericalismo colarse en el debate para intentar controlar la moral y las vidas de toda la sociedad; y vimos las presiones inéditas sobre lxs representantes del pueblo hasta el último minuto.
Pero les ganamos: aun a pesar de todo eso, la batalla más difícil, la que no se podía ni siquiera nombrar, la ganamos. Y por eso hoy Argentina es un país un poco más laico. Un país donde los fundamentalismos religiosos fallaron una vez más en sus intentos nada disimulados de imponer su moral religiosa a toda la sociedad. Y por eso podemos soñar con que también la separación formal y real entre iglesia y Estado es posible.
Cada ampliación histórica de derechos alcanzada cuesta arriba contra el poder clerical fue y es un avance laicista. Lo fue la Ley de Educación Sexual Integral, que aun debemos luchar por actualizar y poner en práctica en todo el país; lo fueron la Ley de Matrimonio Igualitario y la de Identidad de Género, entre tantas otras. Y hoy, el aborto legal nos hace un país un poco más justo y un poco más laico.
Porque hoy más que nunca recordamos las palabras de Aída Kemelmajer: «La historia del derecho en Argentina es la historia de la secularización».
Hoy celebremos, que desde mañana retomaremos el trabajo. Porque el aborto legal, seguro y gratuito es ley. Y el Estado será laico.